Cómo superar una relación con un mujeriego y sanar tu corazón

Si estás aquí, probablemente hayas vivido el torbellino emocional de salir con un mujeriego. Al principio, parecía un sueño: atento, encantador y siempre tenía las palabras justas para hacerte sentir especial. Pero poco a poco empezaste a notar contradicciones, mentiras y actitudes que te hicieron dudar. ¿Mensajes a otras mujeres? ¿Desapariciones repentinas? ¿Promesas vacías?

Déjame decirte algo importante: no es tu culpa. Muchas mujeres hemos caído en esta trampa porque los mujeriegos son expertos en ilusionar. Pero hoy no estamos aquí para lamentarnos, sino para sanar y salir más fuertes que nunca. En este artículo te compartiré estrategias reales para soltar el apego, recuperar tu autoestima y cerrar ese capítulo de una vez por todas.

¿Lista? Vamos juntas en este camino.

¿Cómo reconocer que estuviste con un mujeriego?

Antes de sanar, es importante reconocer lo que realmente pasó. Un mujeriego no es simplemente un hombre coqueto, sino alguien que juega con los sentimientos ajenos sin remordimiento. Estas son algunas señales claras:

  • Es encantador al inicio, pero luego cambia: Al principio te hacía sentir única, te decía que nunca había conocido a alguien como tú. Luego, su atención disminuyó o se volvió intermitente.
  • Siempre tiene «amigas» misteriosas: Tienen muchas “amigas” con las que mantiene contacto constante, pero nunca te da claridad sobre su relación con ellas.
  • Es un maestro de las excusas: Si le reclamabas algo extraño, siempre tenía una explicación perfecta y lograba que terminaras dudando de ti misma.
  • Nunca se compromete realmente: Puede decir que le gustas mucho o que «nunca ha sentido esto por nadie», pero evade cualquier conversación sobre una relación seria.

Si te identificaste con varias de estas señales, no te culpes. Los mujeriegos saben exactamente qué decir y hacer para mantenerte atrapada. Ahora, el enfoque debe estar en cómo salir de esto sin mirar atrás.

¿Por qué nos cuesta tanto alejarnos de un mujeriego?

A pesar de todo lo que nos hacen sufrir, muchas veces nos cuesta soltar a un mujeriego. ¿Por qué? Aquí algunas razones:

El refuerzo intermitente: Cuando un mujeriego te da atención de forma impredecible, tu cerebro lo interpreta como una recompensa inesperada. Eso crea adicción emocional y hace que te aferres más.

El «síndrome del pero puede cambiar»: Muchas mujeres creen que si él realmente las ama, cambiará. Spoiler: Un mujeriego no cambia a menos que él lo decida, y eso no depende de ti.

Nuestra autoestima se ve afectada: Con el tiempo, empezamos a pensar: «Si él se va, ¿quién más me va a querer así?». Error. Él no define tu valor, tú eres quien debe recordarlo.

Es fundamental entender esto para empezar a tomar decisiones que te liberen.

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El primer paso: Cortar el contacto y establecer límites

Ahora que ya identificaste el problema, toca actuar. Y sí, la parte más difícil es el corte definitivo.

Bloquéalo en redes sociales y WhatsApp: Ver sus publicaciones solo hará que recaigas. No necesitas saber si está en línea ni ver con quién sale.

Elimina su número: No confíes en «tenerlo ahí por si acaso». Si lo guardas, en un momento de debilidad podrías escribirle.

Evita los lugares donde sabes que estará: Al menos por un tiempo, es mejor no exponerte a verlo.

Si trabajas o estudias con él, mantén distancia: No tienes que ser grosera, pero tampoco darle conversación ni entrar en su juego.

Si sientes que necesitas decirle algo antes de desaparecer, hazlo una sola vez, con firmeza y sin dejar la puerta abierta. Algo como: «Esto ya no me hace bien, así que prefiero alejarme. No quiero seguir en contacto, espero que todo te vaya bien.»

Después de eso… desaparece de su radar.

Desintoxicarte emocionalmente: Cómo liberarte del apego

Los primeros días sin contacto pueden ser difíciles, pero aquí algunas estrategias que te ayudarán:

Cambia el foco de atención: Cada vez que pienses en él, haz algo por ti misma. Sal a caminar, escucha música, escribe en un diario, pero no te quedes en la nostalgia.

Dale tiempo a tu cerebro para reajustarse: La adicción emocional no desaparece en un día. A medida que pasan las semanas, tu mente se reprogramará para vivir sin él.

Haz una lista de razones por las que debes olvidarlo: Cada vez que sientas ganas de volver, lee esa lista. Te recordará por qué mereces algo mejor.

Trabajar en tu autoestima: El verdadero antídoto contra los mujeriegos

Este es el momento para reconectar contigo misma.

Haz actividades que te hagan sentir poderosa: Yoga, baile, gimnasio, cursos, cualquier cosa que te haga sentir bien.

Rodéate de personas que te valoren: Amistades sanas, familia, gente que te haga sentir querida.

Crea nuevos estándares: ¿Qué NO vas a aceptar en tu próxima relación? Escribe una lista y tenla presente.

¿Y si vuelve a buscarte? Cómo resistir la trampa del «te extraño»

Spoiler: Va a volver a buscarte. Porque los mujeriegos siempre regresan cuando sienten que los olvidaste.

  • Si te escribe con nostalgia: «Me acordé de ti…»Ignóralo.
  • Si te dice que ha cambiado: «Ahora sí estoy listo para algo serio.»No caigas.
  • Si te busca solo cuando necesita atención: «Estoy mal, solo quería hablar.»No eres su terapia.

La regla de oro: Si te trató como opción, no lo conviertas en prioridad.

Pasar página: Cómo abrirte a nuevas oportunidades amorosas

Después de sanar, te darás cuenta de que hay hombres increíbles allá afuera. Para que eso suceda:

  • No te apresures en buscar a alguien nuevo solo por llenar el vacío.
  • Aprende a identificar señales de alarma en futuras relaciones.
  • Cuando alguien de verdad te quiera, no tendrás que suplicarle atención.

Conclusión

Superar a un mujeriego no es fácil, pero sí es posible. El secreto está en enfocarte en ti, recuperar tu poder y no aceptar menos de lo que mereces. No te castigues por haber caído en su juego, lo importante es que ahora tienes el control.

Mujer, eres valiosa, única y mereces un amor que te haga sentir tranquila y segura, no uno que te haga dudar de tu valor.

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